Por fin un momento de descanso...odio estos días llenos de exámenes.
Pero que remedio es lo que toca.
Hoy quiero hablar un poco de la organización y jerarquía existente entre los hombres lobo y humanos dentro de Instinto. Crear esta parte fue quizás una de las cosas que más me costó a la hora de escribir porque tienes que tratar de que ningún hilo quede suelto y todo esté bien rematado. Pero también fue divertido, en cierto modo cuando escribo me siento poderosa, en definitiva soy yo quien decide que puesto le corresponde a cada uno...aunque suene algo cruel...
Bueno, empezaremos con los lobos.
Entre ellos podemos encontrar:
-"Lobos Blancos" aquellos que no disfrutan siendo lo que son y desean vivir como personas normales. Es decir, tratar de llevar una existencia más o menos parecida a la que tenían antes de ser transformados.
Su vida está dividida entre su parte animal guiada por el instinto y el auto control que tienen que tener sobre él.
Para dejar mejor definido a este grupo de hombres lobo aquí dejo un fragmento del libro que me gusta especialmente porque creo que ilustra muy bien esa lucha interna del personaje que la protagoniza por controlarse.
"[...]Solos, pensó Jeff. Una vez que comenzase la película por mucho que ella gritara nadie la oiría y si intentase escapar le resultaría imposible debido a que la distancia entre las filas de las butacas era muy escasa e incluso para salir debería pasar por su lado. Si era rápido podría abalanzarse sobre ella y probar su carne mucho antes de que le diera tiempo a tomar aire para gritar... El sonido intenso de la cabecera inicial de la película le despertó de su ensoñación. Intentó concentrarse en la película. Ella reposó su cabeza sobre su hombro, se puso rígido. Aquello era una agonía. Ariadna apoyó su mano sobre la de él y empezó a acariciarle. La sensación era la misma que tener hambre y mirar un escaparate lleno de dulces sin poder comprar ninguno, no sabía cuánto podría soportar eso.
La película era muy sangrienta y eso no hacía más que alterar sus sentidos.
-He de irme. Dijo a la vez que se levantaba.
-¿Por qué? aún queda la mitad- Replicó contrariada por aquel cambio.
-No me gusta la película y esta sala me agobia. Contestó.
-Es verdad es un poco mala, vallamos a dar una vuelta. Salieron, ya era prácticamente de noche a pesar de ser las siete y media de la tarde [...]"
-"Los otros" Evidentemente la otra cara de la moneda. Estos lobos, lejos de odiar el hecho de ser hombres lobo, se consideran superiores por serlo. No creen que deban vivir condenados a controlarse y a velar por la seguridad de los seres humanos, ya que opinan que simplemente son comida. A pesar de sus ideas no pueden dejarse ver y cometer crímenes tan arbitrariamente, ya que existen dos organizaciones que se encargan de controlarles con castigos crueles de ser necesario.
Este tipo de hombres lobo es fácilmente reconocible porque cuentan con unas marcas, en diferentes partes de su cuerpo, que les identifican como lo que son "Los Otros".
En este párrafo se ve cual es su postura.
"[...]-Hermanos- con un amplio gesto de sus brazos trató de abarcar simbólicamente al conjunto de lobos allí reunidos- Estamos aquí por una razón común. Observaros, marcados como simple ganado. Tachados de bestias inhumanas y perseguidos por los que consideran actuar en nombre de la justicia. Negados por los necios de nuestra especie que inútilmente tratan de defender a una raza inferior. Es hora de que dejemos de escondernos, es hora de que la ley esté en nuestra mano. Llegó el momento de luchar por el puesto que nos merecemos- La luna brilló con intensidad como reclamando el aullido que los más de cincuenta lobos presentes le dedicaron [...]"
Y ya decir que si la existencia de los hombres lobo, de cara a la humanidad es un secreto, a la hora de escribir se volvió necesario crear algo que se encargara de asegurarse de ello.
Y de ahí surgen:
-"Los Diecinueve" Por regla, un hombre lobo que transforma a un humano tiene la capacidad de controlarle mentalmente y darle órdenes que él no podrá desobedecer. Pero en realidad solo los hombres lobo que han sido transformados y sus creadores no se hacen cargo de ellos tienen la capacidad de dirigir a otros. Es decir, se necesita algo así como ser "liberado" de tu creador para poder ejercer control sobre un humano que quieras transformar. En la actualidad, en la que se encuadra esta historia, todos los hombres lobo tienen a vivir solos ( ya que antiguamente se agrupaban en manadas) y por ello es necesario que exista algo que sea capaz de controlar a los hombres lobo recién transformados y ellos son Los Diecinueve.
Os pongo aquí la explicación en palabras del protagonista Jeff :
"[...]Hay tres grandes líderes por cada continente, en América hay seis, tres en América del norte y otros tres en el sur. Hay tres más en África, Europa, Asia y Oceanía y en la Antártica hay sólo uno. Esos diecinueve son los hombres lobo que nos controlan. Muchos creen que son inmortales, pero no es cierto, cuando uno muere es sustituido por otro que ha sido elegido especialmente para ser líder. Son capaces de controlar a todos los lobos de sus territorios y gracias a ellos hay muchas menos muertes de las que podrían ocurrir [...]"
-"La Orden Luna de Plata" Pero como es imposible que los humanos queden absolutamente al margen de todo este asunto existe esta Orden. Luna de Plata es una organización secreta de humanos, que se encarga de entrenarse y conocer técnicas para mantener a raya a los hombres lobo. Tienen potestad exclusivamente sobre aquellos que matan humanos por diversión a los cuales puede castigar en la medida que se crea conveniente. En la Orden, "Los Plata" como se llama a estos humanos entrenados, a medida que van realizando trabajos van aumentando su nivel desde el más bajo o nivel "E" hasta el rango más alto o nivel "A" con el que se les reconoce con una tatuaje en forma de media luna en el cuello.
Y para acabar he elegido este fragmento que describe lo que sería una casa típica de una persona muy involucrada y de un rango elevado de la Orden Luna de Plata.
"[...]-Ven sígueme.- Se internó por una de las puertas que había en la sala y Belinda le siguió. El pasillo que cruzaban era algo largo y también oscuro. Había fotos pegadas a las paredes al igual que los planos. En ella se podían ver los rostros de diferentes personas que evidentemente no sabían que aquellas fotos estaban siendo tomadas. Lo que más le sorprendió fue una secuencia de fotos que estaban colocadas unas seguidas de otras. En ellas se podía ver a un hombre transformándose, eran imágenes desagradables. En la primera foto el hombre se encontraba tendido en el suelo con una expresión de dolor intenso en su rostro. Siguió observando las demás fotos donde se iba viendo como las extremidades de aquella persona se retorcían formando ángulos imposibles y como su piel iba cambiando para llenarse del pelaje propio de un lobo. En la última imagen había un gigantesco lobo colocado en una posición amenazadora enseñando los dientes y mostrando unos grandes ojos amarillos. Declan tiró de ella.
-Vamos no te pares.- Sin poder evitarlo siguió mirando las fotos a su paso, algunas de ellas estaban tachadas con una gran cruz roja y en cuyo centro se podía leer con claridad “eliminado”. Belinda abrió mucho los ojos y se tapó la boca para tratar de evitar las ganas de vomitar que empezaron a subirle por la garganta. En una esquina sin estar demasiado escondidas había tres fotos, de tres personas distintas, todas ellas muertas. Manchadas de sangre con las ropas rotas, las caras arañadas, la piel desgarrada. Las tres personas tenían profundas marcas de colmillos repartidas por todo el cuerpo. Era el mismo aspecto que tendría un ciervo que estaba terminando de ser devorado por cualquier buitre carroñero. [...]"
Y eso es todo, es un mundo algo oscuro...pero me encanta involucrarme en él. Con tanto esfuerzo invertido para ocultar a los hombres lobo...¿como afirmar que no existen? ;)
Un beso,
Miriam #
